La crisis económica ha provocado que muchos propietarios de fincas rústicas se hayan visto obligados a vender sus terrenos. Por ello, es el mejor momento para aquellos que lleven un tiempo planteándose la compra de una de estas edificaciones y hasta ahora no se hayan decidido, especialmente si sus circunstancias económicas se lo permiten.
Y es que las fincas rústicas son uno de los pocos elementos relacionados con la burbuja inmobiliaria que no ha sufrido una infravaloración en los últimos años. Esto puede parecer un problema para muchos, porque sería el indicativo de que las fincas en venta no están ahora más baratas de lo que lo estaban un tiempo atrás. Sin embargo, hay que plantearse la compra de una finca como una opción de futuro, y el hecho de que no estén perdiendo valor quiere decir que si dentro de unos años nos planteamos colgar el cartel de «vendo finca» y deshacernos de ese terreno no habremos perdido dinero con respecto a lo que ahora podemos pagar por adquirir este tipo de construcciones.
Así, si invertimos ahora en un piso o un chalet es probable que si lo vendemos dentro de unos años de perdamos dinero, algo que no nos ocurrirá si nos decidimos por la compra de fincas rústicas.
Además, en estos momentos la oferta de fincas en venta es bastante grande. Esto quiere decir que si no nos lo planteamos sólo como inversión, sino que también pensamos en disfrutarla en nuestro tiempo libre o bien como forma de ganarlos la vida, ahora tendremos más posibilidades de encontrar una que se adapte a nuestros gustos y necesidades. Tendremos la posibilidad, por tanto, de decidir la zona o si queremos decantarnos por una finca ganadera, agrícola, de caza o de ocio, según nos convenga.
Por ello, aunque muchos piensen que a causa de la crisis no es el mejor momento, quienes quieran empezar a mirar fincas en venta tienen ante sí un gran abanico de posibilidades. Y si nos lo podemos permitir económicamente, qué mejor que tener un terreno en el campo en el que olvidarnos del estrés laboral que nos acecha en estos tiempo o bien de empezar una nueva aventura profesional relacionada con el disfrute de la naturaleza. Crisis puede significar también oportunidad.
Los comentarios están cerrados aquí.